Hay cierto consenso en el mercado de que la suba de las acciones y bonos en dólares actual no está relacionada con una mejora desde el lado macroeconómico o fundamental.
Según distintos analistas, las causas principales que explican semejante aumento son las mejoras que se dieron en el ámbito regional que terminaron favoreciendo a los activos locales.
Por otro lado, se observa que las acciones y los bonos en dólares subieron mientras que el contado con liquidación (CCL) también tuvo un movimiento al alza, lo cual marca una alta correlación entre el tipo de cambio y los activos financieros.
Por último, por el sólo hecho de que los activos argentinos valgan tan poco en términos nominales, con sólo un incremento modesto el rendimiento final de dicha inversión en términos porcentuales termina siendo exagerado, tal como ocurrió con el rally reciente en los ADR y acciones locales.
RALLY IMPORTADO EN ACCIONES
Los analistas del mercado no ven una relación directa entre el rally de las acciones y datos o mejoras fundamentales de la economía local. Por lo tanto, las explicaciones para entenderlo se encuentran en causas ajenas a factores domésticos.
Eventualmente, la recuperación en los activos pudo venir también por ciertas expectativas de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) o cuestiones electorales.
Juan Manuel Franco, economista de Grupo SBS, explicó que la ausencia de un plan económico definido continúa poniendo incertidumbre en el mercado con respecto a las posibilidades de Argentina de lograr estabilizar la macroeconomía, más allá de algunas mejoras en los fundamentos en lo que va del año.
“El mercado permanece escéptico a las mejoras marginales que se vienen sucediendo y sigue esperando por catalizadores que justifiquen la consideración de Argentina como una historia de inversión atractiva. Seguimos viendo como únicos catalizadores un acuerdo con el FMI y un resultado electoral que motive un giro en las políticas económicas orientado a la estabilización“, dijo Franco.
En su informe mensual, Franco agregó que parte del rally de las acciones argentinas se debió a la mejora que se pudo observar también en las de Brasil y señaló que el contexto externo ayudó a las valuaciones de los activos argentinos. Según el análisis de Franco, hay una alta correlación entre la renta variable doméstica y la brasileña.
“El índice de acciones de Brasil subió 31% desde los mínimos de marzo, mientras que el Merval logró subir un 19% en el mismo periodo”, agregó.

Con una visión similar, los analistas de Cohen destacaron que el índice de acciones en dólares de LATAM (ILF) es el activo que, históricamente, muestra mayor correlación con el índice Merval.
Desde la compañía remarcaron que el rally de las acciones argentinas estuvo ligado al frente externo, con una mejor performance relativa debido a que partía de precios más atrasados.
“Si analizamos el comportamiento de este índice contra el Merval en dólares medido por el contado con liquidación desde las PASO a la fecha, vemos una sintonía muy fuerte. Esta correlación se debilitó en octubre del año pasado, cuando el país entró en la corrida de los dólares financieros que terminó con un contado con liquidación en 180. En el último mes, tanto el ILF como el Merval en USD CCL, mostraron fuertes subas“, afirmaron.

Por su parte, en Banco Galicia entienden que gran parte de las subas de activos latinoamericanos estuvieron relacionadas con una overperformance de la región, dentro de un evento de recomposición de flujos hacia mercados emergentes.
Según datos de los analistas del banco, “a nivel global, a partir de abril hubo una parcial recuperación de flujos en el orden de los u$s 11.300 millones. Además, si miramos el flujo de acciones hacia Brasil podemos observar una sólida tendencia positiva que se remonta a comienzos de abril y totaliza u$s 3.900 millones, coincidiendo con la positiva evolución del Ibovespa“, afirmaron.

MEJORA DE LOS BONOS
Los avances de la renta fija local también pueden ser explicados gracias a la mejora en los bonos de mercados emergentes a nivel global. El riesgo país cayó 11% desde su pico reciente, a la vez que los títulos soberanos volvieron a acercarse a paridades del 40% en promedio.
Desde Cohen sostuvieron que la suba de los bonos argentinos se dio en sintonía con una fuerte apreciación de la renta fija emergente, sobre todo la de peor calificación.
“Si analizamos el índice de Bloomberg, que sigue a los bonos emergentes de peor calificación crediticia, podemos ver que el rendimiento promedio de los bonos de este índice fue similar al de los argentinos. Podemos concluir que casi todo el rally de la renta fija argentina estuvo ligado al frente externo”, sostuvieron desde Cohen.

Desde Banco Galicia coincidieron al señalar que la dinámica de los bonos argentinos estuvo influenciada por la dinámica alcista en la deuda de Brasil y de la región.
“Si analizamos la correlación histórica del precio de GD30 tanto con el precio del BR10 como con el índice de deuda Latam, podremos ver que a fines de abril ésta alcanzó niveles negativos significativos para luego en mayo incrementarse y hasta superar el promedio con Latam en torno al 35,4%”, comentaron.
Según el análisis de los economistas de Banco Galicia, se observan movimientos similares en los títulos soberanos de argentina en dólares y los de Brasil a 10 años y la deuda de Latam en moneda dura.

CORRELACIÓN CAMBIARIA
Por último, a la hora de explicar el rally de los activos financieros podemos encontrar que también hay una alta correlación con el dólar Contado con Liquidación.
Es decir, a medida que el Merval en dólares y los bonos en moneda dura subían, también lo hizo el CCL.
Según Fernando Marull, economista y director de FMyA, si bien en los dos últimos meses vimos una fuerte suba de las acciones, la misma vino acompañada de una dinámica alcista en el CCL a pesar de las intervenciones del BCRA.

PRECIOS BAJOS
A la hora de explicar las exageradas subas en términos porcentuales, hay que remontarse a los valores que ostentan los activos locales.
Es decir, parte del importante incremento de las acciones en términos porcentuales se debe al bajo valor que tienen las mismas.
Si un activo tiene un precio muy bajo y sube u$s 1, dicho avance en términos porcentuales es mucho mayor respecto de otro activo que también sube u$s 1 pero que su valor nominal es mucho más alto.
Dicho de otra manera, si un activo pasa de u$s 3 a u$s 4 está subiendo un 33% mientras que otro que aumenta de u$s 100 a u$s 101, esta solo subiendo 1%, pese a que también subió u$s 1 en términos nominales.
En parte, esto explica lo que sucedió con muchas de las acciones argentinas que registraron un incremento de entre u$s 1,5 a u$s 4, con ganancias implícitas de entre 30% al 50% gracias a que su precio es muy bajo en términos nominales.
El Merval vale hoy u$s 400, lo cual representa sólo un 22% de lo que supo valer en 2018 cuando el índice llegó a cotizar en u$s 1800. Así, las acciones argentinas valen entre un 7% y un 25% en promedio de lo que valían en 2018.

Incluso con este rebote, papeles como los del Grupo Supervielle, Edenor, IRSA, Banco BBVA Argentina y Grupo Financiero Galicia muestran perdidas de entre 88% y 73 por ciento.
De hecho, si observamos el panel Merval y dividimos el precio de las acciones en pesos por el contado con liquidación, veremos que el 52% de las acciones vale menos de un dólar.
En tanto, el 75% de las acciones vale menos de u$s 2 y el 90% de acciones en pesos medidas por contado con liquidación vale menos de 5 dólares.
Solo YPF y Mirgor tienen un precio en dólares (pesos divididos por el CCL), mayor a 5v dólares.

El Cronista.