Marcelo Fell, IAEF: "Con la vacuna actuando, la economía asomará a una nueva normalidad en el 3° trimestre"

Marcelo Fell, IAEF: "Con la vacuna actuando, la economía asomará a una nueva normalidad en el 3° trimestre"

Con la presencia del vicejefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, hasta mañana el miércoles se extenderá el 38º Congreso Anual del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), en un evento en modalidad virtual, por segundo año consecutivo.

Los CFOs y gerentes de Finanzas de las principales firmas del país analizarán “Nuevos desafíos y oportunidades para la Argentina”, de la mano de economistas y analistas políticos, en un año signado por los efectos de la pandemia y de las elecciones legislativas de medio término.

Entre otros, Ricardo Arriazu, Martín Tetaz y Emanuel Álvarez Agis serán algunos de los economistas invitados a exponer. Mariel Fornoni y Eduardo Fidanza darán la perspectiva de los analistas políticos.

Del lado de los privados, expondrán Rolando González-Bunster, CEO de InterEnergy Holdings; Daniel Herrero, Presidente de Toyota Argentina, Diego López, Socio de PwC Argentina, e Ignacio Moyano Córdoba, CEO de Stoller Argentina & Uruguay para hablar sobre cambio climático y Gabriel Rubacha para exponer sobre litio.

 

Para exponer sobre la inclusión social, estará Jorge De All, presidente de la Asociación Cuerpo & Alma, y Agustín Salvia, del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA.

“Todos los colegas tuvieron que adaptar su actividad a la nueva normalidad que estamos enfrentando, tanto en los procesos, los sistemas como en la adecuación de los negocios. Esta situación no ha llegado a su fin”

Marcelo Fell, gerente de Finanzas de Transener y presidente del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF) será el encargado de la apertura. En esta entrevista con El Cronista, explicó las expectativas de los CFO para este año.

-Han elegido este año el lema “Protagonizando los nuevos desafíos, Oportunidades para la recuperación de la Argentina” ¿Cuáles son a priori esos desafíos?

-La Argentina se ha venido frenando en términos de crecimiento económico desde hace muchos años; en el pasado reciente se agregó un ciclo adverso, a partir del sudden stop que ocurrió en 2018 y el intento de corrección macroeconómica en 2019. Y sobre eso la pandemia, con el consecuente impacto significativo sobre la actividad económica, la inversión, el empleo y la pobreza. La tarea de reconstrucción, desde lo coyuntural pero también en la agenda de los problemas estructurales de Argentina, es muy importante y un gran desafío para todos aquellos que tanto desde lo público como desde lo privado debemos afrontar tomando el protagonismo que las circunstancias ameriten.

-¿La Argentina está aprovechando las oportunidades que se le presentan? ¿Cuáles serían a su juicio?

-Hoy por hoy la mejor oportunidad la brinda el aumento de los precios de las materias primas. Argentina aprovechó esta circunstancia para aumentar las exportaciones y fortalecer un nivel de reservas internacionales que sigue luciendo débil, pero no tanto como en el 2020. La negociación de la deuda fue un paso importante. Pero hacia adelante queda realizar un esfuerzo importante, como señalé, tanto en lo coyuntural, como el ordenamiento fiscal, la reducción de la tasa de inflación, la negociación con el FMI, cuanto en cuestiones de largo plazo que apunten a fortalecer el proceso de ahorro-inversión claves del crecimiento económico.

 

-El programa del Congreso le da un lugar preponderante a las elecciones legislativas. ¿Es el principal driver para la estabilidad cambiaria y los activos locales?

-Las elecciones legislativas siempre son importantes. Son parte del proceso democrático. Las encuestas indican que la sociedad requiere respuestas frente a los problemas que la aquejan, económicos, de seguridad, ahora sanitarios y seguramente se manifestará con sabiduría a través de su voto. Obviamente la falta de visión de un futuro claro y de un rumbo por alguna incertidumbre que la sociedad pueda percibir, históricamente incidió en la estabilidad cambiaria y en el precio de los activos locales.

“La tarea de reconstrucción, desde lo coyuntural pero también en la agenda de los problemas estructurales de Argentina, es muy importante y un gran desafío para todos”

-¿Qué escenario imagina para los meses previos o para la recta final rumbo a las elecciones? ¿Qué cambiaría con unos u otros triunfando?

-Mientras tanto hasta las elecciones esperamos una economía comenzando a resolver los problemas sanitarios e iniciando una normalización. Si la vacuna le gana la carrera a la aparición de nuevas variantes con mayor índice de contagiosidad, en el último trimestre del año estaremos asomándonos a una nueva normalidad que permita mejorar el nivel de actividad y, en general, establecer un clima de negocios más fluido. Y esto es un condicionante para el 2022-2023 sea cual fuere el resultado de las elecciones. La consolidación fiscal, la reducción de la tasa de inflación, la mejora de las condiciones de acceso al financiamiento, son cuestiones que no dependen de qué partido gane las elecciones.

-¿Descuentan un acuerdo con el FMI? ¿Cree que los precios de los bonos y acciones reflejan algo de esa perspectiva?

-El acuerdo con el FMI tarde o temprano llegará, la cuestión es el cuándo y bajo qué características. Seguramente será un acuerdo del tipo de facilidades extendidas, salvo que el FMI desarrolle en el marco de la pandemia alguna nueva línea de financiamiento. La demora en el cierre del acuerdo seguramente impacta en el precio de los bonos soberanos, tanto para los optimistas como para pesimistas, los que de acuerdo con su visión podrán tomar una posición respecto a este tipo de activos.

-Los activos financieros locales muestran un rebote de la zona de mínimos. ¿Hasta cuándo cree que podrá extenderse ese rally?

-En los últimos meses, el Indice de Condiciones Financieras que elabora el IAEF conjuntamente con Econviews, si bien todavía en zona de stress, viene mejorando desde hace 8 meses, en parte por una mejora en las condiciones locales. En los próximos meses, seguramente habrá volatilidad en las economías desarrolladas, de la mano del aumento de la tasa de inflación, por caso en los EE.UU. y ello puede impactar sobre la tasa de interés internacional y por esa vía en los flujos financieros y comerciales. En el plano doméstico, los períodos preelectorales son, en sí mismo, un factor de cierta volatilidad. Dadas estas circunstancias y tanto por esto último como por la volatilidad a nivel internacional, consideramos que ese rebote dependerá en alguna medida por factores relacionados con la política y las diferentes visiones respecto al resultado electoral y por la influencia de las variables a nivel internacional, dependiendo en este caso por la evolución de la pandemia y sus consecuencias.

-¿Qué caracterizará para los ejecutivos de finanzas y CFO este momento en particular?

La pandemia y su importante efecto en la actividad económica en todos los rincones del planeta, es la que está determinando en gran cantidad de sectores los pasos a seguir. Todos los colegas tuvieron que adaptar su actividad a la nueva normalidad que estamos enfrentando, tanto en los procesos, los sistemas como en la adecuación de los negocios. Esta situación no ha llegado a su fin y, si bien se están haciendo los esfuerzos para salir en el menor plazo de la crisis sanitaria, es difícil vislumbrar cuándo ocurrirá. Por lo tanto nuestra actividad deberá seguir adaptándose a los nuevos desafíos que probablemente se sigan presentando en el futuro.

El Cronista.